Coca mal feta o boba

coca mal fetaHoy voy a confesaros algo: soy, probablemente y muy a mi pesar, la persona más tiquismiquis que conozco… y aunque aquí os conté que me gustan las casas hospitalarias y aquí os solté un rollo sobre la grandeza de lo autóctono, lo que nunca os conté es que sufro por no parecer descortés cuando alguien que no me conoce bien me invita a comer. Aunque creo que buena parte de mi tontería la dejé en un lugar remoto de la estepa masai…
Siempre he pensado que mientras mi conciencia me lo permita, cuando se trata de costumbres culturalmente opuestas a la mía, debo dejarme llevar… pero casi siempre tropiezo con la misma «piedra» en forma de comida… y eso fue lo que ocurrió aquél día en aquél poblado masai del norte de Tanzania, donde fui agasajada con un «estofado de cordero» (que olía a cabra viva) acompañado de unas blancas y satinadas bolas de sebo procedentes del mismo animal… Debo admitir que mi primer impulso fue buscar una excusa para no comer pero llegado el momento y viendo la cara de orgullo del anfitrión, no tuve valor y pronto me encontré sentada en un tosco asiento, junto a varios lugareños, alrededor de la cabra con su blanca guarnición. En ese momento eché de menos un poder de concentración y un dominio de mis emociones que no tengo… ya que cuanto más exaltaba el anfitrión su manjar (no todos los día se mata una cabra), más mareada me sentía yo… y llegó mi turno de coger con la mano mi grasiento trozo de carne con tropezones… por supuesto todos clavaban sus ojos en la nzungu (blanca) flaca… Me metí un trozo de aquello en la boca, el resto lo pasé a la otra mano e inmediatamente dos lagrimones saltaron de mis ojos, preludio de la arcada que vino después… Salí, de un salto, de aquella casita de una sola estancia y olor a cabra viva y aspiré, ya fuera, todo el aire que pude. Cuando me recuperé, volví a entrar y me disculpé, alegando estar mareada… pero ya todos se reían y entendí, por sus gestos, que estaban pensando, con cierto desprecio: «nzungus»!!!
Así que cuando digo que me gusta lo autóctono y probar cosas nuevas, me refiero, por supuesto, a las cosas que me gustan… como esta receta de la comunidad valenciana, cortesía de Ángela (seguidora muy querida) de la coca mal feta o «boba» y cuyo nombre, sea dicho de paso, no entiendo ya que ni está mal hecha ni mucho menos parece boba…

INGREDIENTES:
-1 huevo
-100 ml de aceite de oliva suave o girasol
-200 ml de leche
-100 gr de azúcar
-250 gr de harina normal
-Ralladura de 1 limón
-1 sobre morado + 1 sobre blanco de gasificante (levadura de doble acción que se vende en Mercadona).
-Canela molida + azúcar para espolvorear

-Batimos el huevo con el azúcar y la ralladura de limón durante un par de minutos, intentando introducir todo el aire posible.
-Incorporamos el aceite y la leche y mezclamos todo bien hasta que quede totalmente integrado.
-En un cuenco mezclamos la harina y los sobres de gasificante e incorporamos esta mezcla a la líquida.
-Forramos una fuente de horno (de 23 cm x 15 cm aprox) con papel de horno engrasado y vertemos la mezcla.
-Espolvoreamos con azúcar y canela (para obtener una costra dura).
-Horneamos (horno precalentado a 180 grados) durante unos 40 minutos o cuando el palillo salga seco y la coca esté dorada por arriba.

El resultado es un bizcocho ligero, sorprendentemente esponjoso, teniendo en cuenta que sólo lleva un huevo, e ideal para sustituir la bollería industrial del desayuno… ¡que tengáis una muy feliz semana!!!

coca mal feta

49 comments

  1. Mary says:

    Una coca impresionante, pienso probarla sin tardar mucho. Soy fan de las cocas a muerte!!! Vaya historia en el poblado!!! te comprendo perfectamente!!!

    • martaestevezansede says:

      ¡Gracias, Mary… por gustarte la coca y por comprenderme!!! La verdad es que me encantaría poder probarlo todo sin reparos; eso es algo de lo que no estoy demasiado orgullosa…
      Un besito.

  2. Ángela says:

    Ayyy que tengo que confesarte que me ha dado un vuelco el corazón cuando he entrado en tu blog (te creía aún de vacaciones navideñas) y he visto la coca boba. Y no lo digo porque la hayas publicado, que también hace ilusión, si no porque la has probado y te ha gustado. Espero que en tu tribu también haya causado el mismo efecto. Me encanta la introducción que le has hecho. Si tuviera que decidir que me gusta más en tus entradas si las introducciones o las recetas… me pondrían en un serio aprieto. Me iría a la opción fácil NS/NC, jeje.
    Marta lo dicho, gracias, gracias por hacer de los lunes un día feliz. Un beso.

    • martaestevezansede says:

      Ángela, ¡me encata esta coca!!! Prueba de ello es que la he publicado; te cuento que la hice el viernes y el sábado por la mañana sólo pude desayunar un centímetro cuadrado de ella…
      ¡Gracias a tí, Ángela, por tu receta y por estar ahí!!!! Sois vosotros los que hacéis que mis lunes sean especiales… con vuestras visitas y comentarios.
      Un besito grande.

  3. Susana says:

    No conocía yo la anécdota de la cabra, pero puedo imaginarte perfectamente, jaja..
    Con esta coca seguro que no pasa eso, tiene una pinta estupenda, así que yo que soy bizcochera la probaré seguro.
    Un besito!!!

  4. Monie says:

    Ja,ja. Si me estaba oliendo a cabra el ipad y todo!! Yo la verdad es que me gusta todo, y sí que pruebo las cosas de cada sitio que voy. En México comí saltamontes con guacamole, no me hicieron gracia, pero no salí corriendo por lo menos ;) la coca tiene que estar buenísima, a ver si me la apunto. Un beso guapa. Monie

    • martaestevezansede says:

      ¡Gracias, Monie!! La verdad es que me gustaría ser así, poder probarlo todo pero NO PUEDO… De todas formas, te cambio sin pensarlo tus saltamontes por mi cabra brava con bolas de sebo!!!
      Un besito.

  5. Elena Perez del Castillo says:

    Que pinta tiene esta coca!!! Apuntada!!! Envidia me das sabiendo que estuviste por esa parte del mundo tan arraigada a la naturaleza, ancestral. Pero tu experiencia con la cabra….demasiado valiente eres, yo no habría soportado ni el olor. Una gran historia,.gracias por compartirla :)

    • martaestevezansede says:

      ¡Gracias, Elena!! Yo creo que al final lo que te llevas de la vida son las experiencias, aunque incluyan cabras, ¿verdad?
      ¡Gracias a tí por leerla!!
      Un besito.

  6. Cristina Janeiro López says:

    Difícil bocado el de la cabra….pero el de la coca… en mi casa no duraría diez minutos!. Tendré que intentarla!
    Bonitas fotos, espero hayas tenido suerte con los reyes…

    • martaestevezansede says:

      ¡Ay, sí, Cris… muy difícil!! Yo además soy como los perros que buscan trufas… quiero decir que tengo un olfato hiperdesarrollado y con según qué cosas simplemente NO PUEDO!!! El olor a bravío es una de ellas…
      Al final hablamos con SSMM y decidimos esperar un poco para no precipitarnos… ¡no sabía que había tanta variedad de cámaras en el mercado!!!
      Un besito.

  7. Virginia Martín Orive says:

    Marta como siempre me haces disfrutar de lo lindo con tus relatos, tus fotos y tus recetas. Aunque esta no sea tuya, tuya. Lo de la arcada lo entiendo y hasta ha podido llegar a esta habitación el olor a cabra viva. No siempre el poder de concentración nos es dado. Ja, ja. Besos y Féliz Año preciosa.

    Virginia «sweet and sour»

  8. Churretosa says:

    Jajaja, este manjar autóctono que nos traes lo probaría sin pensármelo 2 veces, aunque no pudiera decir lo mismo del bicho del que hablas en tu relato… me he sentido mareada hasta yo sólo de pensarlo!!!
    Tu coca parece deliciosa.
    Besos

  9. apfelstrudelkuchen says:

    Feliz año Marta!!!!

    Ya estoy de nuevo por aquí visitando blogs y trabajando en el mio después de unas merecidas vacaciones por el pueblo!!! Como me ha gustado la coca que has preparado y como no, leerte!!! Disfruto con ello!!!

    Un besito preciosa,
    Sandra von Cake

  10. xabilikeschocolate says:

    Algo así me sucedió a mi subiendo al kilimanjaro. Mi recien adquirido marido se empeño en probar la comida de los guías y no pude tragarla, imposible de masticar… Me lo has hecho recordar. Las fotos de la receta preciosas y la receta facilita, como a mi me gusta.
    Saludos

    Maite

    • martaestevezansede says:

      ¡Muchas gracias!! Bueno, puede ser que ese país taaan bonito y al que yo le tengo tanto cariño, no sea «lo más» en alta cocina pero también puedo decir que he comido muy bien allí, en una época en la que estuve bastante ligada al país. Por cierto, ¡qué bonito el Kilimanjaro!, ¿verdad??
      Besitos.

  11. Nuria Eme says:

    Lo has relatado tan bien, que casi estaba sentada en el tocón contigo a punto de coger mi trozo de carne. Ayyyy, cómo te entiendo, ese olor es, para salir dando saltos como los Masais y no volver la vista atrás :)
    La Coca es una delicia, en mi blog es una de las recetas con más visitas, y en casa es un visto y no visto. La tuya fantástica, por supuesto, las fotos no hace falta que te diga, que son preciosas a más no poder.
    Espero que tengas un maravilloso año, mi niña, besotes.

    • Nuria Eme says:

      Me acabo de fijar en los ingredientes y son exactamente iguales a la mía :), así que ya si que te puedo decir con conocimiento de causa, que tu coca estaba exquisita. jaja

    • martaestevezansede says:

      ¡Muchas gracias, Nuria!¡Pues no me habría venido nada mal algo de ayuda en aquél momento!!
      ¡Qué gracia!! Así que compartimos receta, ¿eh?
      Un besito.

  12. Helena says:

    JAJAJAJA, Marta, casi casi te he podido ver sentada en el tocón, pensando «aiaiaiaiaiaiai, que me toca comerme eso»… madre mía, lo que tuviste que pasar. Yo lo pasé una vez muy requetemal con unos saltamontes que trajo una mexicana y que, para ella eran lo más… pero yo alegué que acababa de tener una gastroenteritis y que no podía comer, que estaba con dieta blanda (mentira cochina, pero bueno, el objetico de no probarlos lo conseguí :) ) Esta coca, como bien dices, de boba nada de nada, Bs

    • martaestevezansede says:

      ¡Gracias, Helena!! Yaaa, no te creas que no estuve yo a punto también pero al final no tuve valor de negarme… aunque fuese para acabar haciendo el ridículo!!
      Un besito.

  13. Julia y sus recetas. says:

    No me digas que eso te pasó de verdad…!! que horror, con lo poco que me gusta a mi ese animal (para comerlo, claro), bueno si el cordero es lechal si me gusta. Me pasa igual, me como todo, pero todo lo conocido…
    Esta coca no hace honor a su nombre, de boba no tiene nada, debe estar riquisima!! . Bs.
    Julia y sus recetas.

    • martaestevezansede says:

      ¡Gracias, Julia!! Sí, a mí también me gusta el cordero pero la cabra… será uno de esos «gustos adquiridos»… digo yo…
      Un besito.

  14. Beatriz says:

    Recuerdo perfectamente la anécdota de la cabra y me has hecho reir como entonces….Una receta sencilla y muy rica.
    Besitos.

  15. Yaiza says:

    Dios mío! solo de pensar en esa bola de cabra-cebo a mi también me dan arcadas! Pobrecita, yo creo que no hubiese sido tan diplomática, me hubiese importado un pimiento lo que pensase el anfitrión y hubiera salido corriendo de allí. Me quedo con tu coca que tiene muy buena pinta, perfecta!

    • martaestevezansede says:

      ¡Gracias, Yaiza!! Uf, es que no se mata una cabra todos los días… Creo que habría sido un poco grosero decir «no»… aunque al final terminasen pensando que era medio tonta…
      Un besito.

  16. Cakes para ti says:

    ¡¡Hola Marta!! ja,ja, vaya apuro, supongo que dirías «tierra trágame» , pero te entiendo perfectamente, menudo revuelto de estómago tendrías… Ahora por lo menos, aquél mal trago, se ha quedado en una divertida anécdota.
    Gracias por compartir la receta y anécdotas como esta. Besitos.

  17. Laurel y Menta says:

    Ay Marta, qué experiencia inolvidable!! No sé cómo hubiera reaccionado yo ante semejante situación, pero tampoco creo que hubiera sido capaz de salir y volver a entrar disculpándome…, eso tiene un gran mérito. Seguro que yo me hubiese marchado, sin valor para enfrentarme a sus miradas…, en fin…
    La coca, una chulada: qué sencilla de hacer, y qué rica tiene que estar… Tomamos nota para desayunos y meriendas.
    Un besito, preciosa.

    • martaestevezansede says:

      ¡Gracias, chicas!! Más que la experiencia en sí, toda aquella época es inolvidable… Me alegra comprobar que no soy la única montando numeritos!!
      En cuanto a la coca, sencilla y rica a la vez, 100% recomendable.
      Un besito.

  18. Kika = María says:

    Qué gracia Martiña !!! Es una anécdota que no nos habías contado y es buenísima. ¡ Eres una campeona !
    Te cuento que la receta la hice y me salió estupenda y no como el fudge, que aunque fuera facilito, salió otra cosa comestible y muy rico pero nada que ver con el tuyo, a saber que hice, ji ji ji.

    Un besazo “ la Dummie de la cocina”

    • martaestevezansede says:

      ¡Y yo que creía que os lo había contado todo, Kikiña!!
      Me alegra lo de la coca; recuerda que para hacer el fudge (¡receta que nunca falla!!!), tienes que utilizar la cantidad exacta de ingredientes (léase, ¡de leche condensada!!).
      Un besito grande.

  19. Kichi says:

    Pues he seguido tu recomendación, y he hecho esta coca para el desayuno de hoy. Así que ayer en muy poquito tiempo ya la tenía lista para solucionarnos el desayuno. Y el resultado genial, esponjoso y sabroso y ha tenido mucho éxito en casa. Así que gracias!!!. Besitos

Responder a Beatriz Cancelar respuesta


*